viernes, 4 de mayo de 2012

5 practicas erróneas en tu negocio que pueden llevarte a cerrar


Prácticas erróneas en tu empresa

México D.F. a 27-02-2012 
POR: Alonso Bárcenas

Muchas veces como emprendedores no tenemos una guía establecida de cómo manejar y llevar nuestro negocio. 
Llegamos a implementar métodos que pueden estar afectando a nuestra empresa y eventualmente provocar su cierre.
Es por ello que te damos a conocer cinco prácticas erróneas que, de incurrir en ellas, pueden terminar con la vida de tu negocio.
 Así que evítalas a toda costa si lo que quieres es permanecer en el mercado.

No aceptar tarjetas bancarias
Esta práctica además de ser absurda, es una de las políticas más frustrantes al condicionar al pago únicamente en efectivo. 
Hay negocios incluso que permiten el pago con tarjetas de crédito o débito, pero condicionado, por ejemplo: “en la compra de al menos x cantidad, no se aceptan tarjetas”.
  • El uso de tarjetas y el auge de la tecnología es un fenómeno irreversible en nuestros días. Inclusive, ya se están experimentando nuevos mecanismos de pago a través de celulares y otros dispositivos móviles.

El no aceptar tarjetas bancarias tiene implicaciones más allá de pagar comisiones o impuestos: 
te hace perder clientes.
Ofrece a las personas siempre todos los mecanismos de pago posibles.
 Entre más opciones de pago tengas, menos objeciones presentará el cliente al momento de decidir su compra, y más venderá tu negocio.
 Genera inconsistencias entre tus sucursales
Contar con otras sucursales va más allá de la generación de ingresos, es también darle al consumidor más ubicaciones para adquirir tus productos. 
Sin embargo, al tener varios puntos de venta pueden existir inconsistencias que confundan o molesten al cliente, entre ellas:
  • No vender los mismos productos en tus sucursales.
  • No respetar las horas de apertura y cierre.
  • Tener diferente calidad en tus productos.
  • Tener experiencias de compra distintas.
  • Cambio del precio de un producto de sucursal a sucursal.

Mantener la experiencia en todas las ubicaciones es un factor clave del éxito: 
  1. mismo producto, 
  2. mismo precio y 
  3. misma experiencia.


No publicitar tu negocio
Si eres de los que piensa que tan sólo al abrir las puertas de tu negocio te “caerán del cielo” los clientes, o que tu producto se venderá sólo y que hacer publicidad es repartir volantes a diestra y siniestra, estás equivocado.
La competencia en el mercado te obliga a diferenciarte de los demás, haciendo cosas diferentes para destacarte de entre las múltiples opciones para los consumidores.
Todo negocio necesita:
  1.  mercadotecnia y publicidad. Invierte en la imagen de tu local, haz campañas en revistas zonales, establece programas de lealtad (descuentos a clientes frecuentes) y utiliza medios electrónicos como el Internet: redes sociales, publicidad en dispositivos móviles, videos en YouTube, etc.


Contratar gente inadecuada para tu negocio
No realizar un buen trabajo de selección de personal al elegir a las personas que atenderán a tus clientes te puede costar muy caro.
¿Cuántas veces no te ha pasado que una persona que te atiende en un negocio te trata como si fuera un castigo para ella, no te saluda al entrar, no sonríe y ni te atiende bien
Este tipo de personas alejarán a tus clientes rápido, muy rápido.
Así que cualquier persona que tenga que tratar con tu clientela debe tener un perfil orientado al servicio, es decir, le debe gustar tratar con la gente y servir a los demás
Decirle siempre que “NO” al cliente
“No lo tenemos disponible, 
No estará a tiempo,
 No quedó bien, 
No se puede…”
Cada vez que dices “No” estás afectando tu negocio
Todos los consumidores buscan ser atendidos con:
  1. amabilidad, 
  2. prontitud y 
  3. profesionalismo.
  4.  Quieren sentirse satisfechos con los servicios que adquieren, felices si es posible.

Tener clientes satisfechos no es tan difícil. 
  1. Crea procesos estandarizados en todas las áreas de tu negocio a fin de que eviten problemas, aseguren la calidad del producto y garanticen experiencias positivas.

Ante la creciente competencia diaria, sólo podrás sobrevivir en el mercado si te preocupas por incorporar las mejores prácticas y desechar las malas. 
Mucho éxito.

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